sábado, 3 de octubre de 2009

Neuronal

Las corrientes sinápticas fluían por todo su cerebro, sin parar en ningún lugar en especial, y si fuera visto por una de esas modernas técnicas de imagen que son capaces de detectar el minúsculo campo electromagnético que dejan, se vería como un espectáculo de luces y color, todo dentro de su cabeza. La música, como siempre se amoldaba a ello (¿o era al revés?). En cualquier caso, su hiperactividad cerebral era placentera. Se sentía vivo e inteligente.
No, el no necesitaba aparatos implantados en su cuerpo para sobrepasar los límites. No necesitaba ser un transhumano, si es que de verdad existían. Estaba explorando zonas de su mente antes ni siquiera sospechadas. Caminaba por los haces de nervios disfrutando el viaje.

PD: me encanta Andy Hunter.
PD2: mi ordenador luce (y nunca mejor dicho) ahora mucho mejor.

No hay comentarios: