Un día escuchó el mar, olió la sal y sintió la humedad. Nunca antes había conocido el mar. Y un día cualquiera lo descubrió; se extiende hasta donde alcanza la vista. Sus aguas bravas, temperamentales, esconden muchos misterios. Se necesitaría una vida para descubrirlos todos. Maravillado, se quedó observándolo durante horas.
Fue aquel día cuando el caminante dejó la costa para adentrarse en aquel oscuro, misterioso, tormentoso y hermoso mar.
1 comentario:
no me gustan tus frases hostiles en "haga su comentario"
pero la entrada me gusta muchisimo
Publicar un comentario